Un problema de proporciones bíblicas está surgiendo en el este de África. Billones de langostas del desierto están devorando las plantaciones y pasturas en países como Etiopía, Somalia, Kenia, Tanzania y Uganda.
Ante la dificultad de controlar la infestación, el este de África esta al borde de una crísis alimentaria, dijo el director de la ONU para Alimentación y Agricultura, Dominique Burgeon, a la cadena BBC News.
Según el relato de la ONU, un enjambre medio de langostas puede, en un solo día, recorrer 150 km y consumir lo equivalente a alimentos para 35000 personas.
Hay temor de que las langostas – que ya son casi 200 BILLONES – se multipliquen todavía más. La ONU dijo que los insectos están reproduciéndose tán rápido que el número puede crecer 500 veces antes de junio de este año.
Organizaciones cristianas de ayuda humanitaria, como Compassion, están presentando ayuda a las personas afectadas por la infestación, que ya sufrían con la extrema pobreza y la falta de alimento antes de que llegaran las plagas.
“Compassion trabaja con los pobres de los pobres: la mayoría de ellos son altamente vulnerables a cualquier desastre que sucede en el país. Por tanto, cuando un desastre es asociado a otros tipos de desastres, el impácto es muy grande”, dijo el especialista Tewodros Gebremeskel.
Las organización Compassion trabaja con los compañeros de iglesias locales en Etiopía para atender las necesidades físicas y compartir la esperanza de Cristo. “Mientras la distribución de alimentos es realizada, también compartimos la Palabra de Dios para que ellos puedan oír el verdadero Evangelio”, dijo Getachew.
Gebremeskel dijo que los misioneros están “orando para que Dios intervenga en la situación e impida la expanción de langostas”. “Si Dios no interviene en esta situación, no podremos gerenciar o mitigar el desastre”.
Agricultores en países como Zambia están enfrentando otra crísis: la falta de agua.
Dos años de muy poca lluvia obligaron a Consepter Hamalambo, de 28 años, a abandonar sus campos de maíz este año.
“No pude cosechar nada el año pasado o este debido a la sequía que me forzó a buscar trabajo en otro lugar”, dijo Hamalambo a CBN News. “Voy de puerta en puerta pidiendo trabajo a las personas de mi aldéa, para comprar comida”.
La organización Visión Mundial está distrubuyendo harina, semillas de maíz resistentes a la sequía para las familias más golpeadas por el fenómeno.
“No hay agua suficiente para generar electricidad, de modo que las empresas quedan 15 horas o 16 sin electricidad por día”, dijo Mark Kelly, de Visión Mundial en Zambia, a la cadena CBN News. “Eso también tiene impacto sobre el sustento de las personas, eso tiene un impacto sobre la posibilidad de comprar comida”.
Fuente: Guiame
