Conozca por qué la Pornografía es un Cáncer para el Alma del Cristiano

A pesar de las repetidas advertencias contra la pornografía, muchas personas todavía están siendo arrastradas por sus redes. La triste realidad es que una vez las personas comienzan a consumir pornografía, se vuelven incapaces de abandonar ese mal hábito.

El pastor Jeff Bethke, autor del libro, “Amor que Permanece”, apuntó a varios motivos por los cuales las personas deberían volverse de la pornografía. Compartió un mensaje de su libro en el sitio “XXXChurch”, un ministerio online dedicado a ayudar a las personas con dependencias pornográficas y sexuales.

Bethke confieso que él mismo fue un usuario de pornografía durante un tiempo y aseguró que la visión constante de aquellas imágenes lo transformaron en un “monstruo”.

“Yo me volví increíblemente egoísta y tímido. Tenía una visión horrible de las mujeres en cada relación en que me veía envuelto”, aseguró.

El autor compara la pornografía con un cáncer en cualquier relación, porque arrastra al que la practica y es destructiva. En verdad, la pornografía, juntamente con el uso constante de smartphones y redes sociales, está aplastando los cerebros de las personas y afectando sus vidas personales.

“La pornografía es como un cáncer. No hay error en decir que destruye almas, matrimonios, relaciones, empleos y vidas personales. En los últimos 3 a 5 años, investigaciones muestran que la pornografía y la tecnología, como nuestros smartphones y las redes sociales, están remoldeando nuestros cerebros y ambos se están mezclando químicamente en el interior. Piensen en esto: No es algo que sólo eliges hacer. Sino la cuestión es que esto también está cambiando literalmente algo en nosotros”, destacó.

“No es un estigma decir que estamos rehaciendo la humanidad en cierto aspecto, pero eso no está sucediendo de forma adecuada. Estamos básicamente realineando la raza humana. Es el mayor resultado que estamos teniendo – no sólo con la pornografía y la tecnología, sino también en la forma en que ellos se integran el uno con el otro – es la muerte de la intimidad en las relaciones”, agregó.

Bethke dijo que la pornografía es la antítesis de la intimidad, porque roba a las personas la chance de expresar el amor verdadero. La pornografía construyó un muro entre las personas y sus seres queridos, porque esconde su “verdadero yo” siempre que ellas son vistas por alguien.

“La verdadera intimidad envuelve un intercambio”, explicó. “Alguien ofrece vulnerabilidad y el otro honra esa vulnerabilidad. Enseguida, la otra persona retribuye esta vulnerabilidad, creando un bello ciclo. Ese vínculo es exclusivo y oculto, es sólo para que las dos personas contemplen y forman parte de él. La antítesis de la intimidad ocurre cuando una persona dentro de esa relación invita secretamente a otras personas a este espacio, a través de la pornografía”.

Para aquellos que quieran vencer su vicio a la pornografía, Carl Thomas de la iglesia “XXXChurch” también escribió en su blog que ellos no debieran acarrear con el peso de sus pecados, ya que Jesucristo ofreció llevarlos y perdonarlos.

“Jesús no murió para que todos podamos vivir en nuestras pequeñas prisiones de ruptura y aislamiento. Cuando Él tomó nuestros pecados, también llevó toda la vergüenza que conllevan estos errores”, concluyó.

Fuente: Guiame

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