ISRAEL.- En vez de barbas largas y largas vestimentas, éstos usan trajes y polos. Sus tabletas son electrónicas, no hechas de piedra, y en vez de cayados usan smartphones. No parecen ser diferente al resto, pero este grupo de israelíes esta preparándose para ser la próxima generación de profetas.
Por solo 200 shekels, que equivalen a 53 dólares americanos, y luego de solo 40 clases express, la Escuela de Profetas “Caín y Abel” certifica como profeta a cualquiera que lo desee.
La escuela, la cual comenzó a funcionar este mes, se llenó de críticas, muchas de las cuales la denuncian de ser una blasfemia o un fraude.
Desde el punto de vista religioso, la tradición Judía reconoce como verdaderos a unas pocas decenas de profetas de la era bíblica – desde el bien conocido Abrahám, junto con Moisés y Elías, hasta los profetas menos conocidos que llevaron mensajes de juicio como Micaís, o Habacuc.
La tradición judía, también enseña que nadie puede ser profeta desde que los Romanos destruyeron en el año 70 el Segundo Templo en Jerusalén, y la vuelta de los profetas solo puede ser revivida desde la llegada del Mesías y la construcción del Tercer Templo.
También si el tema es considerado desde un punto de vista filosófico, ¿Cómo se aprende inspiracion divina en una escuela? ¿Puede alguien aprenderlo?
“No hay forma de que alguien pueda enseñar a profetizar” dijo Rachel Elior, profesora de Pensamiento Judío en la Universidad Hebrea de Jerusalén.
“Es como abrir una escuela para convertirse en Einstein y Mozart”
Estas opiniones no han amedrentado en absoluto al fundador y único profesor de la escuela, Shmuel Hapartzy, quien es un seguidor de Chabad, un predicador Judío Ortodoxo.
Cualquiera que busque dentro de la currícula de las clases temas como “Partiendo el mar para primcipiantes” o “Cómo predecir el futuro” o incluso “Principios para Proclamar un líbro Profético” lamentablemente van a ser desepcionados, ya que en la escuela los estudiantes aprenden acerca del significado de los sueños, la clasificación de ángeles, etc. Aprenden también a como discernir los sentimientos de las personas a traves del análisis de su comportamiento y apariencia.
Hapartzy no garantiza que su curso le dará a sus estudiantes una linea directa con Dios. Sin embargo, dice, que la currícula del mismo provee de herramientas escenciales para sacar el profeta que llevamos dentro.
Fuente: Times of Israel
