Conozca 4 verdades acerca del Infierno que lo acercarán a Dios

La idea del castigo eterno por el pecado, es una “doctrina que transmite crueldad y le entrega a las generaciones del mundo una cruel tortura, sostuvo el agnóstico filosofo británico Bertrand Russell en el año 1967.

Sus puntos de vista son mas consistentes que el John Hickl el filosofo y religioso, que se refería al infierno como una “fantasía sombría” que no es solo “moralmente repugnante”, sino “una grave perversión del Evangelio cristiano”. Sin embargo Clark Pinnock, el teólogo considerado como evangélico, descarto el infierno con un pregunta retorica: “¿Uno no se imagina que el mismo Dios que dio a su hijo para que pagara por los pecadores haría una cámara de tortura en algún lugar de la nueva creación con el objetivo de castigar a los que lo rechazaran a un dolor eterno?”.

En Mateo 25: 41 nos dice cuatro verdades sobre el infierno que nos deben causar dolor ante la perspectiva de cualquier persona que experimenta sus horrores.

1. El infierno es un estado de separación de Dios.
En el día del juicio, Jesús dirá a todos los incrédulos: “Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno” (v. 41). Este es el mismo tipo de lenguaje que Jesucristo usa en otros lugares para describir el juicio final de los incrédulos (ver 7:23).

El estar lejos del Señor es estar separado de cualquier cosa y de todo lo bueno, es difícil de concebir ya que la personas mas miserable goza de algunas bendiciones de Dios, como respirar, la comida que nos suministra y muchos ostros aspectos de su gracia común.

En la tierras los ateos disfrutan de los beneficios de la bondad de Dios, sin embargo en el infierno, esas bendiciones no existen. Los consignados recordaran la bondad de Dios y tendrán conocimiento de los placeres interminables del cielo pero no podrán tener acceso a ellos.

2. El infierno es un estado de asociación.
Cristo dice que el fuego eterno del infierno estaba “preparado para el diablo y sus ángeles” (Mateo 25:41). La gente es creada para Dios y el infierno para el diablo. Las personas que mueren en sus pecados, sin Jesús como su Señor y Salvador, pasarán la eternidad en el infierno con el único ser que es muy diferente a Dios. Es una ironía trágica que muchos de los que no creen en el diablo en esta vida van a acabar siendo atormentados pasando la eternidad con él en el infierno.

3. El infierno es un estado de castigo.
Jesucristo lo describe como “fuego” (v. 41), y un lugar de “castigo” (v. 46). El infierno es un lugar de castigo donde se hace justicia a través del pago de los delitos.

La miseria y el tormento del infierno son la maldad y la seriedad del pecado. Los que protestan contra la doctrina bíblica del infierno por ser excesiva traicionan su comprensión inadecuada de la pecaminosidad del pecado. Para los pecadores ser consignados a nada menos que los horrores del castigo eterno sería un error de la justicia.

4. El infierno es un estado eterno
¿Como es posible que Dios pida el castigo infinito para un pecado finito?, para empezar la persona contra quien se comete el pecado es infinita, los delitos contra el infinitamente santo que es infinitamente bueno y de una infinita gracia sin olvidar que es el gobernante supremo del mundo y por ende merece un castigo sin fin. Los condenados al infierno seguirán pecando por la eternidad. En el infierno no hay arrepentimiento, por eso el castigo seguirá por siempre y el pecado continuara.

Al estar claros de lo que significa el infierno tendremos mas amor hacia el Señor y a las personas.

Fuente: Evangelio Puro

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