Conozca las Tres Mentiras que existen acerca del Diablo y los Cristianos suelen creer

Existen en el ambiente evangélico, enseñanzas que son transmitidas hace mucho, repetidas por generaciones de personas, recibidas por tradición, las cuales jamás fueron analizadas con el cuidado necesario a la luz de las Escrituras.

Existen en el ambiente evangélico, enseñanzas que son transmitidas hace mucho, repetidas por generaciones de personas, recibidas por tradición, las cuales jamás fueron analizadas con el cuidado necesario a la luz de las Escrituras. Podríamos realizarnos esta pregunta: “¿Creemos más en la Biblia o en lo que enseñan las personas?”

¿Estaremos dispuestos a creer más en la Biblia, aunque lo que ella enseñe, sea diferente a lo que enseñan los líderes de las Iglesias?

Hasta los demonios creen en Dios y en Su Palabra, podemos estar completamente seguros de eso! Ellos no solamente creen que Él existe, sino que creen que Dios es un Dios Santo, un Dios que aborrece el pecado, un Dios de verdad, que prometió juicios, y que cumplirá su venganza sobre ellos. Ésta es la razón por la que los demonios “tiemblan” se estremecen – ellos conocen a Dios más claramente que la mayoría de los seres humanos, y estan amedrentados. El Diablo sabe esto, pero muchos cristianos no comprenden esta realidad espiritual. Veamos al menos tres cosas que son enseñadas sobre el Diablo y que son divulgadas en distintas iglesias, como si fueran verdad, pero que en realidad no lo son!

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1. El Diablo gobernará el Infierno eternamente

Ésta es una de las clasicas mentiras enseñadas acerca del Diablo. Sabemos según las Escrituras, que él no administra ni supervisa el infierno. Incluso él mismo será lazado al Lago que arde con fuego y azufre según Mateo 25:41 y Apocalipsis 20:10. De acuerdo con estos textos el no será el rey o gobernante del infierno, sino que será atormentado por el fuego junto con los rebeldes y pecadores.

2. El Diablo me hizo hacer lo que no quería

Dea cuerdo con Santiago 1:13-15 cada uno es tentado por su propio mal pensamiento o concupiscencia. El diablo podrá potenciar un deseo, pero el jamás decidirá por nadie, ni ejecutará el mal por nadie, eso es fruto de un corazón pecaminoso. El diablo puede ayudarnos a cometer pecado, pero la desición es siempre nuestra. De allí que la consecuencia de todo pecado recae sobre aquel que lo practica.

3. El Diablo puede hacer pactos con las personas

El podrá hacer pactos verbales con las personas, pero cumplir con esos pactos son otra historia. Él no posee ninguna autoridad para hacerlo si no le fuera dada de lo alto. De acuerdo con las Escrituras “todas las almas pertenecen al Señor” (Ezequiel 18:4)

Fuente: Guiame

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