La Corte Suprema de Rusia aceptó la solicitud del gobierno de declarar a los Testigos de Jehová como un grupo religioso completamente prohibido. Esta decisión fue tomada el 20 de abril, y el grupo religioso pasara a ser considerado como un grupo “extremista”.
De acuerdo a la Corte, los Testigos de Jehová proporcionaban materiales que levantaba el odio hacia otros grupos. La agencia de noticias Interfax explico el jueves al fiscal del Ministerio de Justicia, Svetlana Borisova, indicando que los Testigos de Jehová “son una amenaza para los derechos de los ciudadanos, el orden público y la seguridad pública”.
Los testigos de Jehová afirman que son 175.000 creyentes en Rusia, donde se reúnen mas de 2.000 grupos en todo el país. Los abogados que representan al grupo religioso advirtieron que apelarán esta a decisión.
EL GOBIERNO QUIERE CERRAR LAS OFICINAS CENTRALES
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El ministro de Justicia exigio cerrar las oficinas centrales del grupo religioso cerca de San Petersburgo. Un portavoz de los Testigos de Jehová recalco estar “sorprendido” por dicha decisión. Yaroslav Sivulsky sostuvo que: “Es algo que no me esperaba en la Rusia moderna, donde la Constitución garantiza la libertad de la práctica religiosa”. Ademas el grupo está “decepcionado por esta decision y cómo esto afectará nuestra actividad religiosa”.
En la era de Joseph Stalin, los Testigos de Jehová fueron proscritos,al igual que otros grupos, incluyendo a los protestantes. Esa prohibición fue suspendida en 1991, de acuerdo a la BBC.
LAS ONG CRITICAN LA DECISIÓN
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Human Rights Watch rechazo la decisión del jueves ya que esto es un impedimento a la libertad religiosa en Rusia. Otros grupos de derechos humanos como Sova y Forum 18 criticaron esta decisión. Diversos analistas explican que el fallo es el último paso de dos décadas de tan grande hostilidad estatal hacia este grupo religioso.
EVANGÉLICOS: “ES UN PASO PELIGROSO”
El portavoz de la unión evangélica bautista rusa catalogo esa resolución contra los Testigos de Jehová como “un paso irrazonable y muy peligroso”. El Ministerio de Justicia “está comenzando a separar entre creyentes apropiados e impropios. ¿Qué les impedirá a estos funcionarios mañana que condenen, por ejemplo, a los cristianos evangélicos-bautistas, (ortodoxos) viejos creyentes o católicos? Este enfoque es fundamentalmente malo”, aseguro Vitaly Vlasenko, de la Unión Rusa de Evangélicos Cristianos-Bautistas. Todas las denominaciones protestantes condenaron esta nueva legislación.
Fuente: Protestante Digital
