El renombrado teólogo y obispo anglicano N.T. Wright cree que falta algo muy importante a los cristianos cuando hablamos de la Pascua.
“Este mensaje sobre un Dios airado y una víctima inocente tiene mucho más en común con el pensamiento pagano antiguo en comparación con el pensamiento judío o cristiano.”
Wright afirma que desearía que los cristianos no dejasen fuera lo restante de la narrativa. “El problema es que la última gran cena en la Biblia no es sobre las almas salvas subiendo al cielo como muestran las pinturas medievales, difundidas por el catolicismo. En verdad, es sobre la nueva Jerusalén descendiendo del cielo a la tierra, de modo que el cielo y la tierra se unan para formar una sola cosa”, remarca.
El estudioso resalta que cuando “Uno lee las narrativas de la crucifixión en los cuatro Evangelios, ve que el foco no es solo la muerte, sino Jesús siendo entronado como rey”. Recordó que Mateo, Marcos, Lucas y Juan “tienen ángulos muy diferentes, pero todos convergen para el hecho que, al ser Jesús crucificado, algo sucede. El resultado es que el pecado y la muerte son vencidos”.
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Charlando con la revista Relevant, explicó que su libro más reciente es sobre la “revolución” iniciada en la cruz, pero que va mucho más allá de ella. “Si estudiaramos seriamente el Nuevo Testamento, veremos que la crucifixión de Jesús es el medio por el cual el Reino de Dios es establecido en la tierra como es en el cielo, porque los poderes de este mundo son derrotados y un nuevo mundo nace”.
Trazando paralelos de cómo las tradiciones de las iglesias muchas veces se sobreponen a la revelación bíblica, cuestionó: “Aprender a pensar históricamente y escatológicamente es realmente difícil para las personas en nuestros días, pero cada generación debería preguntarse cómo la resurrección afecta a la vida en mi tiempo”.
Considerando las conmemoraciones actuales de la fecha, observó que “la Pascua nos ordena a pensar sobre una fisicalidad no corruptible, sobre un mundo físico que no está mas sujeto a la decadencia de la muerte. Sin embargo, la resurrección, nos hace mirar hacia atrás para que veamos que todo es acerca del Reino de Dios”.
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En los días en que vivimos, donde el mal parece estar triunfando, Wright pide que los cristianos tengan una perspectiva diferente: “Vaya y lea nuevamente las historias de Mateo, Marcos, Lucas y Juan. Vea que Jesús confrontaba los poderes establecidos, desde los fariseos conspiradores, hasta los demonios. El estaba enfrentando al mal en todas sus formas, y se entregó a fin de tomar todo ese pero sobre Sí para resurgir triunfante”.
Finalizó diciendo que “Este es un misterio muy profundo, y posiblemente nunca lo comprenderemos completamente. Finalmente, nosotros, en occidente, muchas veces somos tentados a pensar que el Cristianismo realmente no realizó grandes cambios en el mundo”.
¿Cuál es la solución? El autor dice que en estas horas necesitamos mirar hacia la cruz y ver que ella cambió todo. Una de las lecciones que el obispo quisiera que todo cristiano aprendiese es que “la misión cristiana es implementarnos la victoria conseguida por Jesús en la cruz. Todo el resto será consecuencia de eso”.
Fuente: Gospel Prime
