La Autoridad Palestina ha pedido a las municipalidades bajar el tono de las celebraciones públicas de Navidad de este año, tras la ola de violencia entre israelíes y palestinos, según informa Christian Headlines.
Hana Amireh, quien encabeza un comité gubernamental de las iglesias en Cisjordania, confirmó que la Autoridad Palestina está solicitando “un cierto descenso” en las fiestas tras la muerte de decenas de palestinos desde mediados de septiembre. La mayoría de ellos murieron durante los enfrentamientos con las fuerzas israelíes o llevaron a cabo ataques terroristas, de acuerdo con el Gobierno israelí.
Amireh dijo que el Gobierno palestino pidió al municipio de Belén -la ciudad donde Jesús nació y donde tienen lugar las celebraciones oficiales de Navidad de los palestinos- no utilizar fuegos artificiales para los días festivos de este fin año y limitar las luces festivas y las decoraciones que tradicionalmente adornan dos calles principales de la ciudad.
El primer ministro palestino, Rami Hamdallah, participará de la iluminación del árbol de Navidad en la Plaza del Pesebre, pero no se quedara a una cena organizada por la municipalidad de Belén, según relató Amireh.
La procesión anual de colores de Navidad, que incluye a los jefes de las iglesias y a los scouts palestinos, se llevará a cabo como de costumbre.
La noticia de la restricción de la celebración de Navidad tiene molestos a los cristianos palestinos, que representan menos del 2% de la población en Cisjordania e Israel.
“Estoy decepcionado realmente”, dijo Ekram Juha, director de la oficina del alcalde de Belén.
“Los palestinos tienen una situación difícil, pero hemos vivido esta situación durante muchos años y las celebraciones se han dado. Este es el lugar donde nació Jesús y si limitan las celebraciones de Navidad aquí se está limitando algo espiritual y santo. Puedo entender la limitación de las celebraciones en otros lugares, pero no aquí en Belén”, comentó Juha, una residente.
Fuente: Mundo Cristiano Tv
